Por qué el USD/JPY está perdiendo su colchón de carry trade

El USD/JPY está perdiendo su colchón de carry trade porque los supuestos que mantuvieron al yen débil durante más de una década están empezando a desmoronarse. La era de tasas de interés cercanas a cero en Japón se acerca a su fin, mientras que la ventaja de rendimiento que antes hacía irresistible pedir prestado en yenes se está reduciendo. La confianza empresarial entre los grandes fabricantes japoneses ha alcanzado su nivel más alto desde 2021, y se espera ampliamente que el Banco de Japón eleve su tasa de política al 0,75% en su reunión de diciembre.
Al mismo tiempo, el dólar estadounidense ya no disfruta de una prima de tasas incuestionable. Las expectativas sobre la Reserva Federal se han estabilizado, pero ya no suben de manera imparable. A medida que la brecha de tasas de interés se reduce y los costos de cobertura aumentan, la mecánica que apoyaba la venta persistente de yenes se debilita. Este cambio es importante porque el USD/JPY ha sido uno de los carry trades más fiables del mercado, y esas operaciones rara vez se deshacen en silencio.
¿Qué está impulsando al USD/JPY?
El motor principal detrás del cambio en el USD/JPY es la creciente confianza del Banco de Japón en que la inflación y los salarios ya no son fenómenos temporales. La inflación en Japón ha superado el objetivo del 2% durante más de tres años, y la última encuesta Tankan muestra que las empresas ahora esperan que los precios suban un 2,4% en uno, tres y cinco años, lo que sugiere que las expectativas de inflación se están anclando.

Esto marca una ruptura clara con la mentalidad deflacionaria que dominó la política japonesa durante décadas. El comportamiento corporativo refuerza esa señal. Las grandes empresas planean aumentar el gasto de capital en un 12,6% en el año fiscal actual, mientras que la escasez de mano de obra es la más severa desde 1991, durante la era de la burbuja de activos en Japón.
Este mercado laboral más ajustado respalda el crecimiento salarial, que el BoJ ha identificado repetidamente como un requisito previo para aumentos sostenidos de tasas. Con las empresas capaces de trasladar los mayores costos a los consumidores, los responsables de la política ahora tienen una justificación más sólida para normalizar la política sin temer un shock abrupto de demanda.
Por qué importa
Para los mercados de divisas, esto no es solo otra historia de subidas de tasas. Es un cambio de credibilidad. El yen ha sido considerado durante mucho tiempo como una moneda de financiación, vendida casi por defecto cada vez que mejoraba el apetito de riesgo global. Ese reflejo se basaba en la confianza de que las tasas japonesas permanecerían ancladas cerca de cero indefinidamente. Los datos Tankan, combinados con un lenguaje cada vez más agresivo del gobernador Kazuo Ueda, desafían ese supuesto.
Los analistas sostienen que la dinámica del mercado laboral ahora está haciendo gran parte del trabajo del BoJ. Capital Economics señala que la aguda escasez de mano de obra “consolida el círculo virtuoso entre salarios más altos y precios más altos”, dando al banco central margen para seguir endureciendo sin socavar el crecimiento. Si los inversores aceptan que la tasa neutral de Japón se sitúa más cerca del 1,5–2,0%, las valoraciones del USD/JPY por encima de 150 se vuelven más difíciles de defender.
Impacto en los mercados y el carry trade
La mayor víctima de este cambio es el carry trade global en yenes. Durante años, los inversores pidieron prestado en yenes a bajo costo para comprar activos estadounidenses y globales de mayor rendimiento, a menudo dejando la exposición cambiaria sin cobertura porque el yen se debilitaba de forma constante. Esa estrategia funcionó porque los costos de financiación eran insignificantes y las perspectivas de política eran estáticas.
Ahora, ambos pilares están tambaleándose. A medida que los rendimientos de los bonos del gobierno japonés suben y los mercados a plazo descuentan más subidas del BoJ hasta 2026, cubrir el yen se vuelve más caro. Esto no desencadena una salida repentina, pero sí fomenta un desmantelamiento gradual. A medida que se reducen las posiciones y se añaden coberturas, la demanda estructural de yenes aumenta, ejerciendo una presión bajista constante sobre el USD/JPY, incluso si los rendimientos estadounidenses se mantienen elevados.
Perspectiva de los expertos
Los mercados están cada vez más enfocados en lo que sucederá después de la reunión del BoJ en diciembre. Una subida de un cuarto de punto ya está mayormente descontada; la verdadera señal vendrá de la orientación futura. Si el BoJ enmarca la política como un movimiento hacia una tasa neutral en lugar de un ajuste puntual, la revalorización del yen podría acelerarse.
La conferencia de prensa posterior a la reunión del gobernador Ueda será analizada en busca de cualquier indicio de que la normalización de la política se extienda bien entrado 2026. Por el lado estadounidense, el panorama es más equilibrado. El último dot plot de la Reserva Federal muestra solo un recorte de tasas previsto para 2026, una postura más firme de lo que el mercado esperaba a principios de año. Aun así, la presión política y los indicadores de desaceleración del crecimiento limitan cuán agresiva puede volverse la Fed. Con datos de empleo e inflación de EE. UU. previstos para esta semana, la volatilidad del USD/JPY puede aumentar, pero la tendencia general favorece cada vez más una lenta erosión del soporte impulsado por el carry trade del par.
Conclusión clave
El USD/JPY ya no está aislado por la dinámica de carry trade que lo definió durante años. El mejor panorama inflacionario de Japón, el mercado laboral más ajustado y un Banco de Japón más confiado están erosionando el argumento estructural para un yen débil. Aunque el ajuste puede ser lento, la dirección es cada vez más clara. Los operadores deben estar atentos a la orientación del BoJ, los datos salariales y las publicaciones macroeconómicas de EE. UU. para confirmar que este cambio se está volviendo permanente.
Perspectivas técnicas del USD/JPY
Al momento de escribir, el USD/JPY cotiza alrededor de 155.14, retrocediendo desde los máximos recientes tras no lograr mantener el impulso por encima del nivel de resistencia de 157.40. Esta zona sigue siendo una barrera clave al alza, donde los operadores suelen esperar toma de ganancias a menos que el precio logre romper al alza de manera convincente. Por el lado bajista, el soporte inmediato se sitúa en 155.10, seguido de 153.55 y 151.76; una ruptura por debajo de estos niveles probablemente desencadene liquidaciones de ventas y un movimiento correctivo más profundo.
La acción del precio indica que el par está retrocediendo hacia la zona media de su rango de Banda de Bollinger, lo que señala un enfriamiento del impulso alcista tras el repunte anterior. Esto sugiere que el USD/JPY podría entrar en una fase de consolidación a menos que los compradores regresen rápidamente.
El RSI, ahora en torno a 56, está cayendo bruscamente hacia la línea media, lo que resalta el debilitamiento del impulso y una mayor cautela entre los compradores. Aunque esto aún no indica un cambio de tendencia, sí apunta a riesgos bajistas a corto plazo si el soporte en 155.10 no logra mantenerse.

Las cifras de rendimiento citadas no garantizan rendimientos futuros.